Alejandro Cánovas Pérez. "La mujer-pájaro". 50 x 40 cm (detalle)
Experiencia
Mis pensamientos van cayendo;
uno a uno,
se arremolinan, llaman a las verjas,
nos envuelven como en un fuego…
y grito callada.
Ojalá esta vez me escuches,
a pesar de los tiempos,
de los silencios,
de las renuncias;
ahora,
que vas de regreso en mis sueños.
Todas las flores están aún
dentro de nosotros,
invernadas, en el caracol de los recuerdos,
pertinaces cual hojas de otoño aferradas a tronco inútil,
ellas,
curiosas de reverdecer.
Te invito nuevamente a descifrarme,
a través del juego de luces y sombras
tejido detrás de mis ojos;
te invito a hablar con mis silencios…
en silencio,
cuando te vislumbre “más pálida que la yerba verde.”
te invito a todo,
por lo doloroso que es.
Ingeniería Inversa
(epigrama)
Miser te Titono, hombre florero,
cuando solo te queden de la pretendida Aurora,
caprichos y exigencias,
las largas uñas de manos y pies
embadurnadas de naranja color.
Dónde ocultarla entonces,
si al paso de no mucho tiempo te reclama
¿todavía me quieres?,
¿todavía me quieres?,
¡acaso, todavía me quieres!
Dónde la encerrarás,
tu aún, atractivo,
mas rodando la piedra de Sísifo
preso del capricho eterno,
para escapar de su vulgar parloteo.